30 de enero de 2016

Memoria: seguimos entrenándote



Hace unos días os hablaba del entrenamiento al que estábamos sometiendo a nuestra memoria. Podéis recordar por si no lo memorizásteis bien haciendo click aquí





Sí, este era efectivamente el juego estrella,.......por poco tiempo. Ahora ha entrado en casa otro que le gana además por creatividad.Pero ya me encargaré yo de que el otro no caíga en el olvido.  Esta mañana a las nueve y media, ya estábamos al lío, ¿locos? , un poco según como se mire porque lo más normal sería que un sábado a esas horas o bien tendríamos que estar en la cama o...., en la cama pero no. Estábamos pintando ¿pintando? ¿pero no nos vas a hablar de memorizar?

Sí, consiste en memorizar también fichas pero ¡pintadas por nosotros! Y es que todos, los cinco, hemos participado. Dicen que pintar relaja jiji.





Éste es el juego y es también como el otro de TIGER. La originalidad es que tú creas cada ficha. Le añades ojos, boca, nariz, colores, detalles e incluso nombres!! 

                                         

Tenemos a Doña Moño,Doña Lacitos, Doña Flor, Don Bisbal, Don Bacilón, Don Peludo y otros más. En algunos hemos usado la imaginación y en otros nos hemos inspirado en Pinterest. Como les gusta pintar, copiar con la vista y calcar, un día creé un tablero, otro más. Dibujar se llama y con su uso se inspiran haciendo la competencia a la creatividad o no, porque a partir de algo puedes crear nuevas cosas ¿no?


¿Y todo ha sido de Happy Family? Puff, ¡qué va! en el momento de pintar la verdad es que sí pero en el momento de jugar...ay ay, ya empezaron las peleitas

-¡Me has quitado al mío!
-¿Yo? ¡No!, lo he conseguido yo!
-¡Doña lacito era mía!


Cada cara que había pintado cada uno, cada ficha que quería ser encontrada por su pintor o pintora y cuando no podía ser....ejem. Al final las aguas se calmaron y ...¡a por otra partida!







Share your creations   #diytiger

En mi humilde opinión, mi recomendación es un SÍ rotundo
Ve a Tiger y llévatelo por 4 euritos y ¡a jugar!, perdón...¡a pintar y a jugar!

Hasta pronto!


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En familia por tu ciudad.




Hoy he decidido abrir  esta nueva sección en el blog. La he llamado En familia por tu ciudad porque a lo que va a estar  dedicada, me gusta hacerlo, personalmente, con mi familia, los cinco pero está claro que se puede disfrutar con amigos, familiares, amigas patinadoras y por qué no, también a solas.

El año pasado descubrí el mundo del patinaje gracias al club PATINADORES DE SEVILLA y poco a poco voy haciendo realidad su lema  Patinar te hace más libre. Ya he conseguido el nivel para poder salir a la calle y empezar a disfrutar. No tengo que dejarlo, como todo, constancia y actitud para pasarlo bien y encontrar el día para salir a la calle.

Los sevillanos, al principio nos quejábamos muchos, de la construcción del carril bici. Que si ésto, que si lo otro, pero hoy tengo que decir que es algo muy positivo. Hoy he disfrutado de mi ciudad, los cinco. Cada vez se ven más familias con bicicletas y patines de un lado para otro. Y al pasar por grupos escuchas éso de: "Mira papá!, yo quiero hacer éso!" (iba por nosotros jaja). 

Gracias al clima y a la disponibilidad de carriles, deslizarte en ruedas por Sevilla se está haciendo cada vez más cómodo. Nosotros en bicicleta y la madre, servidora, patinando. En motopatines, corriendo, caminando, patinando mientras llevas al bebé en el carro,....lo que sea pero hacer algo!!


¿Y por qué he creado esta sección? Yo, como principante en este terrero, me he preguntado y me pregunto aún, por dónde podría ir cada vez que me coloco los patines. Ya he ido por varios sitios, muchos acompañada de los patinadores de Sevilla pero ahora, voy a ir recogiendo aquí todas las rutas que vaya haciendo, comentando algunos detalles...¿Te unes a la ruta #enfamiliapatibicisevilla? 


Inauguro esta sección con la ruta Nervión-Parque de los Príncipes.

Mi punto de salida en la mayoría de los casos va a ser Nervión. Pasando la avenida San Francisco Javier puedes seguir o bien para Ramón y Cajal o bien continuas, como hemos hecho hoy nosotros, por el carril bici dirección Avda. Diego Martínez Barrio, dejando a la derecha el NH Central Convenciones. Continúas recto hasta el cruce con Felipe II, en ese cruce cogimos a la derecha y ya toda la calle de Felipe II hasta llegar al cruce con la Avda. de la Borbolla, encontrándote ahí con una de las puertas al parque de María Luisa. Aquí podríamos haber parado, sería otra ruta, que en otras ocasiones he hecho patinando pero que no me ha gustado mucho debido a que el trote de los coches de caballos hace que el pavimento no sea lo más adecuado para ir en patines, aunque si vas en bicicleta es un sitio perfecto para llegar, aparcar, sacar una manta y un picnic en un instante te puedes montar allí. Una altarnativa de lo más cómoda y barata, si te gusta este plan.

Pero nosotros decidimos seguir un poco más. No entramos por este  parque y rodeamos el mismo para introducirnos en la Avda. de la Palmera, donde a un ritmo tranquilo llegamos hasta el puente de los Remedios. Continuamos por la antigua Avda. Ramón de Carranza, vimos como va para arriba la Portada de la Feria y en un plis plas, estábamos en la esquina de Santa Fé, entrando por la puerta del Parque de los Príncipes que da a Virgen de Luján. 







El parque estaba precioso. No me ha resultado incómodo patinar por sus calles. Entramos por la puerta que da a Santa Fé-Virgen de Luján y y seguimos hasta llegar al final donde hay un aparcamiento, frente al Edificio Urbis. El kiosko de toda la vida, que ha permanecido cerrado, desde hace dos meses está abierto como Kiosko Príncipe. Llegamos sedientos y han caído un par de cervecitas, la segunda sin alcohol. Hemos descansado con un piquislabis para no enfriarnos demasiado y disfrutamos un poco más del parque. El bar y la atención nos ha gustado mucho y es un buen sitio para ir con niños! Me lo apunto, que luego te preguntan dónde poder ir y no caes...suele pasar ¿verdad?

Y lo que empieza se acaba pero aún nos quedaba la vuelta!! Para coger el camino de regreso a casa fuimos por otro lado. Salimos por la misma puerta por la que entramos y nos dirigimos para República Argentina dirección Plaza de Cuba y coger el puente "del Cristina". Para no encontrarnos con toda la gente que suele haber en la esquina del MacDonald´s, tiramos para la derecha para cruzar por el semáforo que lleva al Palacio de San Telmo, coger la calle San Fernando y desde allí dirección barrio de Nervión, que puedes ir bien desde el Prado de San Sebástián o por los jardines de Murillo, con sus respectivos carriles bicis.

En fin, ésta ha sido mi primera ruta #enfamiliapatibicisevilla contada. Espero que os haya gustado y que pongáis en marcha, si no lo habéis hecho ya!! Si quieres aportar alguna, estás invitado/a!!! 

Hasta la próxima!!!




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By Mamis

28 de enero de 2016

Una decena ya!!!




Tengo dos momentos en mi mente. Y los dos ocurrieron hace tiempo. Tendrías tú unos cuatro años, acababa de nacer tu hermano chico unas semanas después de que tú cumplieras los cuatro y tu hermana, no llegaba a los tres años.

Ya en el colegio pensaba...:" Cuando tú entres en quinto de primaria, tu hermano entrará en primero". Uff pero aún queda, me repetía una y otra vez. Me relajaba pensando que todavía faltaba para ese momento. Que mi hijo, al que le ponía el adjetivo de "mayor", seguía siendo un bebé ante mis ojos. Veía pararse el tiempo mientras pensaba lo que en un futuro iba a venir.

Otro día, en aquella misma época, una madre, no recuerdo quién ahora, me comentaba algo: "La cosa cambia cuando ya no hay solo unidades". ¿Eh? "Sí, cuando ya tenga una decena, ya todo pasa corriendo". Entonces la miraba con ojos extrañados porque era algo tan, tan lejano. Era una madre con hijos mayores que los míos, que me miraba con ojos melancólicos, o quizás no, y yo, no la entendía. Y sé que no la entendía porque ahora sí la entiendo.

Respecto a lo primero, ese fenómeno, el cual me parecía extraño, ocurrirá en nada! Aún queda, diréis, pero yo ya no dejo de pensar en ello. Este curso para mí acabado está. Pasando la primera evaluación, la segunda y la tercera vuelan en un plis, plas y entonces,.....llegará septiembre y volveré a escribir otro post, jajajajajaja.

Mi chico, tu hermano, se gradúa este año en Infantil y tú, vas para arriba, cumpliéndose mañana, lo segundo. Viene, La decena. Hace diez años, a esta misma hora, diez y cuarto de la noche, andaba en el sofá con leves contracciones, las cuales a partir de las doce de la noche fueron en aumento. Un mundo nuevo llamaba a mi puerta. Estábamos a punto de ser dos para pasar a ser tres, inagurar el ser familia. Contigo vino un gran cambio en nuestras vidas.

En unas horas será nuestro cumpleaños, sí! también será el mío porque desde entonces todo es nuevo par mí. Como tú experimento momentos nuevos y afianzo día a día aprendizajes. Juntos vamos a dar la bienvenida a Doña Decena y juntos vamos a soplar las velas. Llega el temido número diez, agradecida por todos estos años junto a ti, por verte crecer feliz y sano.

Hace unos años veía esta edad como muy en la distancia y pensaba que con diez, mi niño ya iba a ser muy mayor. Ahora mis allegados me lo repiten pero yo, en el fondo, cuando te miro en la cama, te arropo y te robo un beso, veo a mi bebé. Con un cuerpo mayor, con más ideas, conocimientos, actividades, alegrías, penillas pero eres aún mi niño. Diez años no son nada para todo lo que quiero ver de ti y junto a ti. Y cuando, si dios quiere, demos la bienvenida a la segunda decena, miraré tu cuerpo, tu rostro, tus manos y seguiré viendo a un niño, a mi niño.

Ahora la conversación gira en torno a,...: "En cuanto tenga los diez, vendrán los once, doce,...quince y cuando no te des cuenta, los veinte. ¡Ay calla! Pero es que es así. Estos diez años se me han pasado volando. Tengo y necesito retroceder en mí mente y verme embarazada, llegando a casa juntos en brazos, paseando contigo y de la mano. Necesito sentir tu cuerpecito entre el mío en el sofá en esas tardes de lluvia. Me obligo recordar cuando  miraba tus piececitos y en cuyo día pensé, cómo iban creciendo. Necesito aferrarme a ti, a los recuerdos, a las fotografías para hacer que estos diez años se queden paralizados en mi mente y que éstos no avancen.

Juntos vamos de la mano en esta historia. Ambos hemos añadidos años. Y es que yo también tengo diez años más en mi cuerpo y en mi mente. Diez años que han traído emociones, alegrías, preocupaciones, experiencias nuevas. Diez años aprendiendo a ser madre, con mis aciertos y errores. Con mis inquietudes y temores. Diez años aprendiendo de ti. Y es que en multitud de ocasiones me has hecho poner el freno y decir ¡Pero qué estás haciendo! Gracias por estar junto a mi y gracias por enseñarme que tengo que esforzarme cada día más para sacar lo mejor de ti y de mi. Tú como hijo y yo como madre. 



GRACIAS.

PD: algún día hablaremos acerca de este post, eso espero. Leerlo ahora, ya lo has hecho pero supongo que caerá en el olvido. 



                                                       











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26 de enero de 2016

Memoria ¿te entrenamos?



Uno con la lista delante, la lee y zas!!, se sabe las 30 palabras. 
Una con la lista delante, la lee y una, dos y las que haga falta.

Son fantásticos los tres y tengo que repetírselo más a menudo. 


Queda claro que cada uno es como es. Es algo que en mis años de Universidad aprendí desde primero de carrera hasta quinto y ahora que soy madre, me olvido muchas veces. En esas tardes en la que estás cansada más mental que físicamente, en las que te gustaría cerrar la puerta y que caminen solos, yo pierdo el control. Sí, lo pierdo, me desesperan porque yo como adulta estúpida no pienso que están aprendiendo, cogiendo habilidades y experimentando nuevos aprendizajes. Cada cual a su ritmo. 

No puedo caer en lo que no puedo caer y creo que no hace falta decir más. Me implico y me frustro. Quiero prisas y resultados ya!! ¿Acaso estoy loca? 

Paciencia y más paciencia tengo que aprender como madre de unos niños de primaria y otro que está a las puertas. Por mucho que lo hayas estudiado y requetesabido. Leído en artículos, post, en redes sociales, he caído y sé que tú también...¡ A ver si ahora voy a ser yo la única!


Si no se le queda a la primera, pues a la segunda y si no a la segunda a la tercera....y porque al final el esfuerzo trae su recompensa y de ésto hay mucho para aprender. La vida, al fin y al cabo, es esfuerzo.

Todo va bien y si me relajo todo puede ir a mejor, lo sé. Solo hay que ser constantes, practicar y esforzarse pero si es jugando mucho mejor. Así que:

¡¡¡¡JUGUEMOS!!!!

En esta ocasión, le toca turno a la memoria. Unos nacen con ella y otros no o menos desarrollada y , a veces, abandonada pero a ninguno les hace mejores ni peores. Lo vamos a repetir para que se nos quede bien en la cabecita.

Cuando son chiquititos, bebés, lees sobre ésto y te pones con ellos a jugar a entrenar la memoria, muchas veces de manera espontánea. Otras veces porque nos empeñamos y recurrimos a juegos clásicos y/o tecnológicos pero solo algunos, continúan con la rutina. Yo fui una de ellas. A ratos no se consiguen las cosas. 

Me gusta la rutina. En mi casa la hay en cuanto a horarios para todo y tareas escolares. En ese sentido soy una especie de sargento. Y como alguien se me interponga y cambie planes....uff. Pero la rutina también tiene que estar para ciertos tipos de juegos de habilidades y destrezas porque pasan los años y tu niñita de la guarde y de infantil pasa de curso y ya no es solo colorear y jaja y jiji. Bueno, éso aún sí, faltaría más pero se añaden elementos nuevos. Hay que comprender pero también memorizar.

Llevamos una semana en casa entrenando a Doña Memoria y os voy a decir  una cosa:

NOS LO ESTAMOS PASANDO GENIAL, ya de paso.

Sí, suena a "familia repelente en un mundo de evolución al 3.0" pero es que es así. 

Practicamos por ahora con dos juegos. Uno de fichas y otro muy facilito porque están las fichas por toda la casa. Os cuento.

                                                       


Uno es éste...¡son tan coloridas las fichas! (25 parejas en total). Es un juego muy asequible (3euros) y se venden en TIGER. Supongo que más de uno y una conocéis. A mi lo que me faltaba es haber abierto una nueva tienda cerca de mi casa!!! 

No pensaba yo que les iba a resultar tan divertida, entretenida, imaginativa y adictiva esta caja!!!


                                                           




Y mi esfuerzo va a estar en la continuidad del juego. Y poco a poco ir metiendo otros más, otras experiencias porque está visto y comprobado en niños y en adultos, que siempre lo mismo cansa un pelín. La competición ha entrado en casa. Es un juego muy simple pero muy divertido a la vez.

El otro juego al que me refería y que decía que había fichas por toda la casa, es uno muy tradicional. Observa, cierra los ojos y cuando diga ya, con ellos cerraados, dime lo que recuerdas qué hay en esta habitación. Este juego tiene más que ver con la memoria visual y es que en mi caso, mi hija, parece ser que es la que tiene más desarrollada, con lo que la vamos a potenciar para afianzar sus tareas memorísticas del cole.  

Digo yo una cosa,..... No estaría mal que los adultos también jugáramos a este juego jeje.





Tenemos otro juego en casa para cuando estos dos les cansa pero por ahora el primero va en primer puesto. Es éste.

                                                                 

                 



Os voy a contar un cuento....


Érase una vez una cabra que tenía siete jóvenes cabritillos.

Un día tuvo que ir al bosque y avisó a sus hijos por si venía el lobo: Si entra, dijo, "¡Os comerá enteros!", pero lo reconoceréis por su áspera voz y sus patas negras".
No tardó mucho  y llamó a la puerta y dijo: "Abrid, queridos niños. Vuestra madre ya ha vuelto y os trae una sorpresa para casa uno de vosotros". Pero los cabritillos oyeron por la voz áspera que era el lobo y no lo abrieron.
Un poco más tarde, volvió. Esta vez había comido tiza para suavizar su voz. Pero los cabritillos lo reconocieron por sus patas negras. Pero logró engañarlos la tercera vez. Enseñó su pata teñida con harina y entonces le abrieron la puerta.
¡Vaya! Eso sí que fue malo. Aunque todos se escondieron rápidamente, encontró a seis de ellos y los devoró enteros en un solo bocado. Sólo el más pequeño no lo pudo encontrar, pues se había escondido dentro del reloj de la pared.
El lobo salió par echarse una siesta en el césped.
Cuando la cabra volvió a casa y sólo encontró al cabritillo , se puso muy triste. Junto con su último hijo salió y encontró al lobo durmiendo. Su abultada barriga se balanceaba de una lado a otro.
Sin pensarlo un momento, la cabra abrió la barriga del lobo con un cuchillo, sacó a todos los cabritillos y todos juntos colocaron pesadas piedras dentro de la barriga del comilón. Entonces la cabra volvió a cerrar la barriga con hijo de coser.
Cuando el lobo despertó, tuvo mucha sed. Fue a un pozo y se inclinó sediento por el borde. Pero las piedras eran tan pesadas que arrastraron al lobo dentro del pozo y se ahogó.
Así los cabritillos y su madre están de nuevo todos reunidos, bailando alrededor del pozo y cantando :"Ha muerto el lobo, ha muerto el lobo, ya pasó nuestra pena".


Problema quitado del medio, problema resuelto. Cada uno que interprete el cuento. 

La pregunta de este juego es ¿Qué niño puede memorizar bien cuántos cabritillos se encuentran en los escondites y lograr salvar siete del lobo? 

1, 2, 3....Empezamos.




Bueno, os he dejado estos tres juegos, que son los que ahora rulan por mi casa. Tengo en mente uno, que lo puedo encontrar muy asequible en las jugueterías OSORNO y no es otro que éste. 

                                                    

El SIMON de toda la vida.




Pues con ésto y un bizcocho, me despido!!!! Y a entrenar la memoria, todos. Es importante y lo dejamos pasar y es que hay claves y consejos para potenciar estos procesos y prevenir futuras enfermedades neurodegenerativas ( información AQUÍ). Por cierto, hoy ha jugado con ellos también la abuela!!!

PD: nosotros somos los que controlamos en casa los tiempos y así de esta manera, debemos combinar el tiempo de televisión, juegos, deberes, lectura... con el momento para entrenar la memoria. Somos los encargados de fortalecerla pero.....¡¡jugando siempre!! Os dejo este enlace, que lo explica muy bien. 



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22 de enero de 2016

Comer es un lujo y un placer.




Me gusta la fotografía. No tengo estudios técnicos respecto a ella pero cuando puedo llevo mi cámara a cuesta. Me interesa captar momentos y gestos. Me gustaría usarla también más. Y como me gusta me gusta mirar y Pinterest e Instagram es el gran escaparate visual. 

Un día ojeando cuentas de comida encontré un perfil y desde entonces la sigo. Ella es fotógrafa y capta bodegones, momentos en la cocina que hacen entrar en la tuya e imaginarte que estás en la suya. El color, los detalles, el movimiento. Ella es Raquel Carmona. No me conoce de nada pero yo os  quiero presentar su trabajo y guardarlo en este blog para el recuerdo. 


                                               
                                                           

















Os podría inundar el post con sus fotos pero creo que es mejor que entréis en sus cocinas e impregnaros de esos sabores y olores. Bueno venga, dos más!






Podéis encontar su trabajo en estas direcciones, solo tienes que picar en los enlaces.

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Comer es un lujo y un placer.

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